De la ciudad romana a la ciudad moderna
El puerto de Palma siempre abierto al mundo

El puerto de Palma siempre abierto al mundo

Es bastante evidente que los habitantes de Mallorca llegaron por mar, aunque no tenemos pruebas empíricas. Sabemos que los fenicios conocían Ibiza 700 años aC, y que promovieron una ciudad próspera de más de 3000 habitantes bajo la hegemonía de Cartago. Esta caerá después bajo el dominio romano, apenas 23 años después, Cecilio Metelo fundó las ciudades de Palma y Pollentia. La nueva ciudad de Palma dependía administrativamente primero de la nueva Cartago y después de Tarraco. Sabemos que el comercio marítimo seguía siendo la función económica más relevante de la Ciudad.

Por lo tanto, cuando las naves romanas llegaron a la bahía de Palma, ya era una bahía habituada a la navegación de naves fenicias, en la que no había ningún muelle artificial y el lugar que funcionaba como puerto era Portopí. Este continuó siendo el puerto más seguro de la ciudad hasta prácticamente el siglo XVII.

Una vez Palma empezó a coger fuerza bajo la dominación romana es muy probable que naves de pequeñas dimensiones pudieran adentrarse por la desembocadura del torrente de Sa Riera, en la parte inferior del actual Castillo de la Almudaina, donde más tarde los musulmanes construirían la formidable atarazana real con una torre fortificada. En el famoso cuadro del Sant Jordi de Pere Nisar se ve el pequeño muelle que se había construido a mediados del siglo XIV abajo de la Almudaina y una zona portuaria más ordenada en Portopí. Estas dos infraestructuras fueron mejorando y creciendo, ya que en el mapa de la ciudad de Antoni Garau del siglo XVII, se ve ya bien formado un muelle que va desde la Lonja hasta lo que será después, en el siglo XX, el muelle de la Riba.

Ya en los tiempos de los musulmanes, Portopí contaba con un faro que iluminaba los barcos que entraban al puerto. Con la conquista catalana/cristiana se siguió usando, y actualmente es el segundo faro más antiguo de España después de la Torre de Hércules en La Coruña.

La importancia del comercio marítimo de Palma con otros puertos del Mediterráneo occidental e incluso, con las costas africanas y Canarias, nos lo demuestran muchas pruebas documentales de todo tipo. Existía entorno a 1350 una escuela mallorquina de cartografía de las más importantes de Europa, como hemos comentado en el capítulo anterior respecto a los Cresques. En uno de estos mapas figura la noticia de la expedición de Jaume Ferrer, que navegando desde Palma llegó a la costa atlántica sahariana. Jaume Ferrer tiene todavía una estatua en la Plaça de les Drassanes, donde, sin pena ni gloria, ve pasar a miles de turistas y muchos ciudadanos no saben ni quién es.

Por otro lado, no hay que quedarse con la idea de que los barcos que navegaban por el Mediterráneo eran pequeños, ya que algunas de las galeras que iban a remo y vela eran tripuladas por unas 50 personas, y más de 100 remeros movían la nave. La navegación de aquellos tiempos combinaba el remo con la vela y, como es de suponer, se sucedían innovaciones continuas para ir más rápido, más seguros y más lejos.

Se conoce que buena parte de la vida marinera de la ciudad medieval estuvo situada en el barrio de La Lonja y del Puig de Sant Pere. Todavía podemos encontrar hoy en día algunos pocos pescadores que se mezclan con los trabajadores náuticos -casi todos extranjeros- que trabajan en los muelles deportivos que llenan la antigua bahía de Palma.

Toda la ciudad baja, lo que son ahora los barrios de La Lonja, Santa Cruz y Es Puig de San Pere, fue una ciudad marinera donde convivían casas nobles de grandes armadores y corsarios, con menestrales de todo tipo de artes y oficios marinos. Tanto hombres como mujeres concentraban su trabajo en torno a los astilleros. Una de las casas civiles más importantes de la zona era la del capitán Antonio Barceló, almirante de la armada española en el siglo XVII, del que hablaremos más adelante.

El barrio estaba enseñoreado por el edificio impresionante de Guillem Sagrera – La Lonja – donde residía el Consolat de Mar, como en Valencia y Barcelona a finales del siglo XIV. Posteriormente se dotó de un edificio propio, la cual ahora es la sede del Gobierno Balear.

El Consulado del Mar era la institución que gobernó el Puerto de Palma desde 1400 hasta 1800. Lo hacía con un conjunto de ordenanzas que fueron instituidas en el siglo XIV, semejantes a las que operaban en Valencia y Barcelona. El gobierno del Puerto estaba sometido a una autoridad importante emanada de los Jurados de la Ciudad y financiada con las tasas que pagaban los barcos que lo usaban. Tanto el gobernador de los muelles de ciudad como el del puerto de Portopí eran nombrados por el Rey.

Esta fascinante historia del puerto de Palma, que seguiremos contando más adelante, demuestra la importancia marítima de la ciudad y la gran significación que tuvo, tanto en tiempo de guerra como en tiempo de paz. El puerto fue desde sus inicios la puerta de entrada y salida de los productos más importantes para el crecimiento de la ciudad y de la población. Ha sido así hasta el dominio de la navegación aérea, a mediados del siglo XX, y después con la construcción de los grandes aeropuertos -Son Bonet y Son San Juan- que cambiarán radicalmente el presente y el futuro de nuestra ciudad.

 

Revisat per

Antoni Ortega Villoslada

Nota importante: El autor del texto es el colectivo “Palma XXI”. La persona que hace la revisión no tiene porque coincidir totalmente con las ideas que expresa el autor.

Doctor en Geografía e Historia por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) en 2007 y premio extraordinario de doctorado en 2008. Como investigador ha centrado sus estudios en el intercambio mercante en los siglos XIII y XIV. Actualmente es profesor de clásicas en el colegio concertado San Francisco de Palma de Mallorca, miembro de la junta de la Sociedad Arqueológica Luliana y Académico de número de la Real Academia Mallorquina de Estudios Históricos, Heráldicos y Genealógicos.

Fonts consultades:

Referencias biblográficas

Joan Alemany Llovera . Els grans ports de les Illes Balears. 2001. APIB..

Bartomeu Bestard.  Portopí, el puerto más antiguo de Palma http://www.diariodemallorca.es/palma/2012/10/07/portopi-puerto-antiguo-palma/799223.html

Antonio Ortega Villoslada. Mallorca y el comercio atlántico. Siglos XIII-XIV*. UNED Illes Balears.

Antonio Ortega Villoslada. La marina mercante medieval y la casa de Mallorca. Pagès Editors, 2015.

Antonio Ortega Villoslada. Andreu Bonmacip, guardià del port de Mallorca. BSAL, 60 (2004), pp. 297-302.

Antonio Ortega Villoslada. El Fossar dels Jueus. De cementerio judío a atarazana comunal. En Mallorca judaica. Asociación Amigos del castillo de San Carlos. Aula General Weyler, cuaderno de Historia nº 5, pp. 133-155.

Antonio Ortega Villoslada. Puertos y fondeaderos de la bahía palmesana en la Edad Media. En Acta Historia et Archaeologica Mediaevalia, 29. UB, Facultat de Geografia i Història, Departament d’Història Medieval, Paleografia i Diplomàtica, 2008, pp. 177-203.

Antonio Ortega Villoslada. El trabajo femenino en Mallorca.La labor de la mujer en la actividad marítima de la primera mitad del siglo XIV. Espacio, Tiempo y Forma, Serie III, H.» Medieval, t. 17, 2004, págs. 461-469.

Julio Rey Pastor .La cartografía mallorquina . CSIC. 1960.

Francisco Sevillano: «Historia del Puerto de Palma de Mallorca» (1974) DIPUTACIÓN PROVINCIAL / GRÁFICAS MIRAMAR.Año: 1974.

 

Referencias en páginas web

Blog Cátedra de Historia y Patrimonio Naval https://pinake.wordpress.com/tag/patrimonio-tangible/page/19

Visita virtual al Far de Portopi. http://www.farsdebalears.org/exposicion-portopi/faros-lighthouses-balears-visita-virtual-al-faro-de-porto-pi/
http://vidamaritima.com/2009/09/un-viejo-centenario.htmlReferències bibliogràfiques.

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Bartomeu Bestard.  Portopí, el puerto más antiguo de Palma http://www.diariodemallorca.es/palma/2012/10/07/portopi-puerto-antiguo-palma/799223.html

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Antonio Ortega Villoslada. El trabajo femenino en Mallorca.La labor de la mujer en la actividad marítima de la primera mitad del siglo XIV. Espacio, Tiempo y Forma, Serie III, H.» Medieval, t. 17, 2004, págs. 461-469.

Julio Rey Pastor .La cartografía mallorquina . CSIC. 1960.

Francisco Sevillano: «Historia del Puerto de Palma de Mallorca» (1974) DIPUTACIÓN PROVINCIAL / GRÁFICAS MIRAMAR.Año: 1974.

Referències en pàgines web:

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Visita virtual al Far de Portopi. http://www.farsdebalears.org/exposicion-portopi/faros-lighthouses-balears-visita-virtual-al-faro-de-porto-pi/
http://vidamaritima.com/2009/09/un-viejo-centenario.html