La ciudad turística: de 1975 a la actualidad
Palma vuelve a girar hacia la izquierda, pero explota el COVID

Palma vuelve a girar hacia la izquierda, pero explota el COVID

Palma vuelve a girar hacia la izquierda, pero explota el COVID

En mayo del 2015 volvieron las elecciones municipales. A nivel nacional, el PP perdió 12,5% de votos y el PSOE perdió un 2%. La bajada a nivel nacional y la estela de casos de corrupción local, además del conflicto escolar de muchos de padres y madres contra el gobierno de Bauzá, influyeron a hacer que el PP perdiera la alcaldía de Palma a favor del pacto de progreso. También influyó que en Mateu Isern no se presentaba como candidato, a causa de los conflictos internos con su partido.

Por primera vez en la historia de la democracia, la alcaldía de Palma se compartiría entre dos personas. José Hila sería alcalde los primeros dos años, del 2015 al 2017, y Antoni Noguera del 2017 al 2019. En las siguientes elecciones del 2019, el voto popular se decantó más hacia el PSOE y José Hila sería el alcalde de Palma, gracias a los votos de Més y Podemos.

El nuevo ayuntamiento de izquierdas tenía dos heridas importantes. Una era por la corrupción que había vivido el Ayuntamiento anteriormente y otra por la situación económica estancada desde el 2008. La corrupción había creado una herida interna muy difícil de curar, puesto que afectaba la confianza de los jefes de los funcionarios entre ellos mismos y hacia los políticos, con unas consecuencias muy nefastas en la gestión cotidiana de la entidad. En cuanto a la cuestión económica, la evolución de los últimos treinta y cinco años había conducido en el Ayuntamiento a estancarse en un techo económico difícil de gestionar. En el siguiente cuadro podemos ver como el gasto por habitante en euros se dobla del 1986 al 1991. Se vuelve a doblar del 1991 al 2008, año en que estalla la crisis, y hasta el 2019 está estancada. El Ayuntamiento tiene más dinero para gastar, pero hay muchas más personas que atender. El resultado es que hay la misma cantidad por habitante.

Teniendo en cuenta los retos que ya tiene una ciudad como Palma, como por ejemplo la carencia de vivienda pública, el gasto por habitante tendría que haber crecido estos últimos años. De hecho, de los ocho municipios más grandes de España, el de Palma es el ayuntamiento con más bajo gasto por habitante.

Durante los últimos seis años, la salida de la crisis del 2008 se hizo a expensas de más masificación turística, más actividad inmobiliaria extranjera, más gentrificación por los desahucios como nos explica Sònia Vives, por la ausencia de vivienda accesible y por más ocupación privada del espacio público. Aun así, el gasto municipal por habitante no subió.

No todos los ayuntamientos han seguido la misma lógica. Por ejemplo, diferente fue el comportamiento del Ayuntamiento de Calvià. Pese a ser uno de los más ricos de España, la crisis del 2008 lo hizo regresar al nivel de 1991. (veáis cuadro 2). Desde aquellos años Calvià se ha recuperado, pero todavía es lejos de las cifras más altas del 2008, año en que doblaba a Palma.

 

Estos fenómenos de masificación turística y pérdida de potencia económica fueron ampliamente debatidos en la ciudad, provocando un aumento de las iniciativas ciudadanas, especialmente por parte de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Palma (FAAVV), pero también otros como ARCA y la Obra Cultural Balear. En el transcurso de este debate ciudadano, nacerá Palma XXI.

Dos campañas ciudadanas tuvieron un amplio eco social. Una fue para limitar el alquiler turístico en viviendas plurifamiliares, es decir, en fincas de vecindarios. Esto se consiguió sobre todo por la iniciativa ciudadana de la FAAVV, presidida por Joan Forteza. La Federación consiguió llevar al Pleno del Ayuntamiento una propuesta limitadora, que la mayoría de regidores y regidoras votaron a favor.

Paralelamente se abrió un amplio debate sobre la masificación turística del centro histórico y la afluencia de muchos megacruceros al Puerto de Palma. Esto provocó una campaña de una plataforma formada por treinta entidades que consiguió la declaración de las instituciones a favor de una moratoria de dos años hasta que no se estableciera la capacidad de carga de la ciudad para acoger los megacruceros.

 

Registro de las más de 11.000 firmas en apoyo al «Manifiesto contra los Megacruceros» en la sede de Autoridad Portuaria de Baleares. Septiembre 2019.

Uno de los objetivos del pacto de progreso de los últimos años ha sido elaborar un nuevo proyecto de ciudad a través de propuestas, algunas realizadas y el propósito de aprobar un nuevo Plan General por un nuevo modelo de ciudad, como bien explica Antoni Noguera en el libro publicado recientemente. Las entidades más activas de Ciutat crearon una plataforma que se llama Futuro por Palma y han conseguido que el Ayuntamiento creara un órgano participativo para debatir el presente y el futuro de la ciudad: el Consejo Municipal de Modelo de Ciudad. En una de las primeras reuniones de este Consejo se aprobaron 10 principios para construir el modelo de ciudad.

 

Mientras tanto, las asociaciones de vecinos y vecinas del centro de Palma elaboraron 40 propuestas para mejorar el distrito centre, un programa de actuaciones muy importante.

 

 

 

 

 

 

Cuando parecía que se empezaba a ver un cambio de Palma en la buena dirección, estalló el marzo del 2020, la crisis de la COVID.

En el momento de cerrar el último capítulo de esta cuarta y última parte de nuestra Biografía, Palma sufre la situación más crítica de su historia reciente y seguramente una de las más críticas de toda su historia como ciudad. Nos tenemos que remontar en los años de la guerra civil o de la «gripe española» para encontrar momentos de traumas de esta intensidad, traumas que afectarán durante muchos años a todas las ciudadanas y ciudadanos.

La situación de paralización casi total de la ciudad por unos cuántos meses era inesperada. Es evidente que las instituciones públicas y las empresas privadas no tenían ningún Plan de Contingencia para una emergencia como esta. Ahora nos hemos dado cuenta claramente que los riesgos de la globalización para la vida cotidiana de las personas son extraordinarios. Lo intuimos con la crisis internacional de septiembre del 2011 provocada por los atentados terroristas en las torres de Nueva York y también lo vivimos bien cerca por la crisis financiera del 2008. Lo estambre viendo también con el avance imparable del cambio climático. Pero esta vez el impacto de la crisis sanitaria está afectando directamente a toda la ciudadanía mundial. Por el contrario, no tenemos una gobernanza mundial, ni siquiera europea, que nos proteja adecuadamente ante estas crisis mundiales.

Los impactos sobre la ciudad de Palma de la COVID-19 (que tan bien retrata la escritora y periodista Lourdes Durán en los artículos semanales en su sección «La ciudad cuántica» en la web de Palma XXI) se empiezan a ver y entender. Su intensidad y amplitud dependerán del tiempo que duren las oleadas de la pandemia y la posterior fase de recuperación. Seguramente podemos contar con que los impactos sobre los ciudadanos durarán -con mayor o menor grado- como mínimo todo este año 2020 y también el 2021.

Revisat per

Jaume Garau i Salas

Licenciado en Psicología Social por la Universitat de Barcelona y Máster en Psicología de las Organizaciones por la London School of Economics. De 1983 a 2011 trabajó en la gestión de los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Barcelona, del Ayuntamiento de Palma, de Marratxí y del Consejo de Mallorca. También ha sido diputado en el Parlamento de las Islas Baleares. Fue presidente del Colegio de Psicólogos de Baleares del 1988 al 1995, presidente de Intress y miembro del Patronato de la Fundación Anesvad. Es socio fundador de ARCA y el 2009 fue llamado socio de honor. El 2016 fundó Palma XXI, siendo su primer presidente. Actualmente es el presidente de la Fundación Iniciatives del Mediterrani.

Fonts consultades:

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFCAS

– Terrassa, Marta. Repensant Palma. Converses amb Antoni Noguera. Illa Edicions. 2020.
– Capo, Daniel i Suau, Nadal. José Carlos Llop: una conversación. ELBA editoral. 2020.

– Oliver Ripoll, Jaume. Crònica desordenada de Ciutat Antiga. Editorial Pagés
– Planas, Rosa. Les edats de la ciutat. Pregó per a la festa de l’Estendard. 31 desembre de 2019. Ajuntament de Palma.

REFERENCIAS WEB

– Sobre las propuestas y actividades del presente y el futuro.www.palmaxxi.com
– Sobre estadísticas de Palma. Foro Ciudad.
– Sobre presupuestos municipales. Presupuestos.gobierno.es

Imagen de cabecera.

José Hila investido alcalde de Palma. Fuente: Wikipedia.