La ciudad turística: de 1975 a la actualidad
Un nuevo urbanismo se abre camino en Palma

Un nuevo urbanismo se abre camino en Palma

Un nuevo urbanismo se abre camino en Palma

La dinámica de la legislatura del primer pacto de progreso en el Ayuntamiento de Palma y el contexto político español en las elecciones municipales de 1983, dio la victoria a los socialistas por mayoría absoluta, obteniendo los 14 regidores necesarios para no tener que pactar con nadie. Mientras tanto, la UCD se hundía, subía AP y UM conseguía 2 regidores. En la izquierda del PSOE se hundían el PSM y el PCIB.

La de 1983 fue una campaña electoral pacífica y tuvo como nota curiosa las 12 horas del mitin que hizo Jaume Santandreu, líder espiritual de la lucha contra la pobreza en aquellos años. El Ayuntamiento no había hecho demasiado en el campo de los servicios sociales, cosa que sí que haría en la próxima legislatura del 83 al 87, con Joana Gual a la cabeza.

Junto a la mayoría socialista, emergió el nuevo partido de UM -aunque con otro nombre- fundado por Jeroni Alberti y que en Palma estaba encabezado por Pedro J. Morey. Como jefe de la oposición aparecía por primera vez Joan Fageda, que ocho años después sería Alcalde de Palma, cargo que ocuparía durante tres legislaturas. También hay que resaltar que de los 27 regidores cuatro eran mujeres, una más que el 79, tres por el PSOE y una por AP. De este modo, las mujeres consolidaban su entrada dentro de la política local.

También el contexto político local cambió radicalmente, puesto que hubo elecciones autonómicas por primera vez y se constituyó el nuevo parlamento. De una manera sorprendente y contra toda lógica cultural, el primer Parlamento se instaló en el edificio de la Lonja, declarado monumento nacional en 1931. Una ocupación que no funcionó demasiado tiempo, puesto que unos años más tarde se instalaría en el Circulo Mallorquín. Esta tendencia a ocupar lugares simbólicos que tenían los nuevos gobiernos democráticos, como también pasó en muchos ayuntamientos, merecería un capítulo aparte.

El primer Parlamento, año 1983. Imagen del álbum del Parlament de les Illes Balears.

El debate electoral estaba marcado, como sería habitual en otras ocasiones, con la visión tremendista del sector hotelero promulgando que tendríamos una temporada turística muy mala. La premonición no fue buena, puesto que el 3 de junio, una vez ya estaba formado el gobierno autonómico conservador, el mismo sector hotelero decía que tenían miedo de que hubiera overbooking en verano. Calvià ya tomaba medidas contra el happy hour. El Big bang turístico se retomaba con fuerza.

Los resultados de las elecciones autonómicas fueron muy ajustados, puesto que Canyelles ganó a Pons por 300 votos. La batalla para formar gobierno entre Fèlix Pons i Gabriel Canyelles cayó hacia el lado de quien más tarde sería el político más popular de la nueva etapa democrática. Esto fue posible gracias al pacto entre AP y UM, un pacto que dicen que se firmó en Madrid en el despacho de Carlos March, nieto de Joan March. La historia se repetía. El maurismo de principios de siglo resurgía de la mano de Gabriel Canyelles, que era nieto de Bartomeu Fons, quién fue Alcalde de Palma y Diputado y jefe del maurismo durante la República (participó en el pacto con Joan March para impedir que el frente popular ganara en febrero del 36). Ahora, otra vez, los nietos respectivos pactaban el primer gobierno de derechas de la CAIB, para impedir que Fèlix Pons fuera el Presidente.

Mientras tanto, la ciudad seguía con su talante provinciano y a la vez cosmopolita. Venía al puerto uno de los cruceros más grandes del mundo, el Queen Elizabeth II, con tres mil personas entre clientes y tripulantes. Bruno Kreysky era recibido por el Alcalde Aguiló al aeropuerto, encantado de estar en Mallorca. Todo esto pasaba mientras Margaret Thatcher obtenía una gran victoria, la primera de las muchas que vendrían después. Thatcher rompería el pacto del sistema de bienestar europeo y haría girar el capitalismo hacia el neoliberalismo, ideología que en el futuro afectaría de manera intensa a ciudades como Palma.

Iniciada la nueva legislatura, ya inaugurado el Parque del Mar en 1984, el consistorio se concentró en aprobar el nuevo Plan General de Ordenación Urbana de Palma, que ya llevaba algunos años preparándose entre estudios y debates. El nuevo Plan, impulsado por Jaume Carbonero, Manolo Cabellos , Joana Roca y otros jóvenes arquitectos, nacerá de otro concepto de urbanismo. El Plan tenía que dar nuevas soluciones a los muchos y antiguos problemas de la ciudad, intentar poner orden al caos del ensanche, equipando de manera igual a todos los barrios. De un centro histórico maltratado por las continuas intervenciones demoledoras, se tenía que pasar a un centro histórico rehabilitado y recuperado para toda la ciudad.

Mapa del PGOU de 1985, digitalizado por Pilar Buendía para la Carta Histórica de Palma (aún no publicado).

En aquellos momentos en Palma residían 320.000 habitantes, casi la mitad de la población de la isla de Mallorca. Palma se había convertido en una ciudad poco acogedora a causa del intenso tráfico, el ruido, las alturas excesivas de los edificios que convivían con otros más bajos, y en la que se echaban de menos espacios libres verdes, así como equipamientos escolares, sanitarios, comerciales y deportivos. La ciudad estaba desorganizada con un centro histórico bastante degradado, que concentraba la mayoría de monumentos, otros barrios dormitorios, otros turísticos y otros rurales. Todas estas zonas se estructuraban en una morfología urbana distorsionada a causa de las varias normativas edificatorias desde el Plan de 1963 en el cual el suelo urbano permitía una densidad de población excesiva.

El Plan de Ribas Piera no paró el crecimiento desordenado y consolidó los polígonos funcionales (industrial, sanitario, educativo, comercial, universitario), todos junto a la vía de cintura, promoviendo el coche individual como medio casi exclusivo de movilidad. La política del nuevo Plan General de 1985 se basó en dos principios políticos: el predominio de los intereses públicos sobre los privados y el crecimiento urbano ordenado y planificado. Por lo que respecta a la organización territorial de Palma, el Plan dividía la ciudad en 37 barrios y 11 sectores. Los barrios se tendrían que dotar de los equipamientos mínimos necesarios mediante la nueva normativa: una escuela, un mercado, un centro social, un campo de fútbol y espacio verde libre. En cuanto a los sectores, debía haber: un instituto, un centro sanitario, un centro asistencial, dotación administrativa, así como un polideportivo y un parque.

En el ámbito arquitectónico, se quería evitar que los edificios fueran sustituidos por otros de mayor altura, mediante su rehabilitación, garantizando el mantenimiento del patrimonio histórico edificado. En el ámbito de las infraestructuras el objetivo era mejorar los servicios de las zonas turísticas, solucionar las deficiencias en las redes de agua y alcantarillado, drenaje, depuradoras, así como de la red eléctrica y de gas, intentando resolver los grandes problemas de infraestructuras que existían en aquellos momentos.

En el ámbito medioambiental se quería proteger los espacios naturales e impedir las parcelaciones y las edificaciones urbanas en las zonas rurales, manteniendo las zonas de interés agrícola y ganadero, así como las áreas de interés natural y forestal, evitando también las actividades extractivas que afectaran al paisaje. Había una intención de crear nuevos parques y zonas verdes, como por ejemplo: sa Riera, ses Estacions (en este momento las estaciones de FEVE), es Carnatge, ses Fontanelles, Son Fusteret, la segunda fase del Parque del Mar, el torrente Gros y la ampliación de Parque de Bellver hasta la vía de cintura; así como también la intención de preservar la costa evitando nuevas edificaciones en estas áreas. Otras zonas de Actuación Singular eran el paseo de la Costa de Levante, el paseo de la Costa de Poniente, el parque del Polígono de Levante, los jardines de Sa Feixina y el Polígono 2 de GESA, así como el de la Playa de Palma.

En cuanto a la movilidad, el Plan quería impulsar el transporte público alternativo (que sustituiría despacio al automóvil privado), zonas de peatones y carriles para el uso de la bicicleta. También preveía nuevas vías que unieran los barrios periféricos con el Centro. La vía de cintura, semicircular que rodea el casco urbano central, tenía que permitir descargar el tráfico del Paseo Marítimo y su distribución hacia las antiguas carreteras radiales, que van hacia el centro del casco urbano y hacia las zonas industriales y de servicios. Igualmente preveía la prolongación de la autovía de Levante hasta el Arenal, de forma que el acceso a la Playa de Palma ya no haría falta que se hiciera recorriendo la costa y sus playas. Serán de gran interés los ejes cívicos en el centro, calles especializadas en que la actividad comercial y terciaria serían la principal función. El Plan de 1985 contemplaba la propuesta de conversión de seis calles del denso ensanche palmesano en zona de peatones para convertirlos en ejes cívicos. Una propuesta pensada para contrarrestar la carencia de espacios centrales que articularan los barrios del ensanche, que no vería la luz hasta años más tarde y solo para dos de los seis ejes cívicos propuestos: el de la calle Fábrica y, posteriormente, Blanquerna.

Comparativa de la calle Blanquerna el año 2008 (arriba) y 2018 (abajo). Fuente: Google Street View.

En cuanto a la rehabilitación de la ciudad histórica, el Plan preveía cuatro PERIS (Plan Especial de Rehabilitación Integral) de los barrios más degradados del centro: el Puig de Sant Pere, es Jonquet, la Calatrava y sa Gerreria.

El PERI del barrio de origen musulmán del Puig de Sant Pere tenía el objetivo de promover la recuperación patrimonial (no exclusivamente monumental) y la revitalización socioeconómica. Este Plan ya estaba iniciado debido a los hundimientos de viviendas que hubo en los años setenta.

En 1985 se aprueba el PERI de es Jonquet. En este barrio exterior al antiguo recinto amurallado, de igual manera que en el del Puig de Sant Pere, se emprendió  una importante promoción pública de viviendas con el objetivo de dar realojamiento en la población residente, además de los habituales proyectos de recuperación patrimonial y de dotación de equipamientos, en un debate que todavía continúa abierto.

El PERI de la Calatrava, que no se aprobó hasta 1991, proyectaba una rehabilitación a través de una mayor dotación en equipamientos y potenciando desde el principio la participación de la iniciativa privada, junto con la promoción pública de viviendas.

En cuanto al PERI de sa Gerreria, antiguo barrio de origen medieval que formaba parte del espacio industrial intramuros (hornos, talleres y fábricas textiles) no se aprobó hasta 1996, ya con una filosofía neoliberal, realizado con la lógica de la especulación y de higienización del tejido urbano deteriorado, dando pie a una considerable gentrificación.

Finalmente, la recta final de la aprobación del Plan General no fue fácil. No estuvo ausente de debates y modificaciones continuas hasta su aprobación definitiva el 31 de octubre de 1985. Empezó a gestionar el Plan con la creación de la Gerencia de Urbanismo el arquitecto madrileño José María Arranz, al que seguiría el abogado Rafael Company.[:]

Revisat per

Rafael Company Corró

Licenciado en Derecho y diplomado en Sociología. Además de ejercer la profesión de abogado, ha contribuido a la redacción de documentos de planificación urbanística de Palma y de los municipios de Marratxí, Pollença, Maria de la Salut o Inca, entre otros. También ha trabajado como secretario del IBAVI y Gerente de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma, del Consorcio de la Playa de Palma y del Patronato Municipal de Vivienda del Ayuntamiento de Palma.

Fonts consultades:

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
González, J. M. (2006): FORMACIÓN DE LA TRAMA URBANA Y TRANSFORMACIONES OCIODEMOGRÁFICAS RECIENTES EN LA CIUDAD DE PALMA DE MALLORCA (1960-2001)*

González, J. M. (2006): Geografía urbana de Palma: la actividad turística en la forma y el desarrollo de la ciudad. In Artigues et al. Introducción a la Geografía Urbana de las Illes Balears. Palma: Grup d’Investigació sobre Sostenibilitat i Territori,. Disponible a https://d769d7ac-f248-4c76-b76b-0bf48986d7e8.filesusr.com/ugd/91d437_7bef3bb905e148dfb6e3fb09a2f072b2.pdf

González, J. M. (2017) Les ciutats de les Balears. Processos d’urbanització i urbanisme. Palma: Lleonard Muntaner Editor, Col·lecció Llibres de la Nostra Terra 106, 127 pàgines.

Horrach, B. Aprendiendo de la balearización: Mallorca, un laboratorio internacional del turismo de masas y de conformación de los destinos maduros litorales. Tesi doctoral dirigida per Joaquín Sabaté. Barcelona: Universitat Politècnica de Catalunya, 2015. Disponible a http://www.tdx.cat/handle/10803/384617 [consulta: 22/01/2018].

Lucena, M. (coord.) (1997): Palma. Guía de arquitectura. Col.legi Oficial d´Arquitectes de Balears, Palma de Mallorca.

REFERENCIAS EN PÁGINAS WEB Y PRENSA
Los hoteleros y Cort se comprometen a mejorar la Playa de Palma. DM. Lunes 17 de junio 1985.

Rafael Company, nuevo gerente municipal de Urbanismo. 10 Mayo 1985. DM

Las cifras de llegadas de turistas a Son Sant Joan están cayendo en picado. 12 de mayo 1985.

La via de cintura de Palma será una autopista. DM Juny 1985.
https://es.wikipedia.org/wiki/V%C3%ADa_de_Cintura

IMAGEN DE CABECERA
Mapa del PGOU de 1985, digitalizado por Pilar Buendía para la Carta Histórica de Palma (todavía no publicado).