El turismo vuelve con fuerza
Recordamos que el turismo en Ciutat había sido una actividad creciente antes de julio del 1936, a pesar de las condiciones económicas internacionales adversas a causa del crack de 1929. Cómo sabemos, este progreso se vio cortado de golpe por los hechos de la Guerra Civil y la Segunda Guerra Mundial. Todo un símbolo de los primeros tiempos del turismo, el Gran Hotel, se transformó el 1941 en la sede del Instituto Nacional de Previsión. Otros establecimientos tampoco volverían a abrir sus puertas. También el Hotel Formentor sufrió una crisis y no volvió a levantar cabeza hasta finales de los 50. Personajes ilustres de todo tipo salieron de Palma a causa de las guerras.
Acabada la guerra europea y enterrado el fascismo alemán e italiano, Franco tenía todas las cartas contra él. Los países vencedores no querían colaborar con su régimen y le declaraban la guerra económica con el cierre de mercados y fronteras como por ejemplo Francia. La ONU no lo reconocía como país democrático. Paradójicamente, su anticomunismo lo salvó del estrangulamiento, gracias al apoyo que recibió de los EE. UU., primero bajo mano y después abiertamente, cuando ya pactó el 1953 establecer en España las bases militares norteamericanas a cambio de entrar en la ONU.
La estrategia de autarquía económica del franquismo seguía matando de hambre a los españoles hasta que salió, casi espontáneamente, la idea de volver al turismo como solución económica y como estrategia diplomática. Así, el 1951 se creó el Ministerio de Información y Turismo y el primer delegado provincial de Baleares de la máxima institución turística estatal seria Francisco Soriano Frade, miembro destacado del franquismo de la época. La interpretación más común era que el franquismo iba a utilizar el turismo para reforzar su régimen, todavía inestable en la nueva coyuntura europea:
“Sin embargo, hay que reconocer que en los años del aislamiento internacional (1946-1950) el Régimen se se dió cuenta que el turismo se había convertido en la única ventana abierta al mundo y en él empezaron a concentrarse todas las miradas: el sector turístico podía levantar nuestra economía a la vez que devolver a España su imagen de país poderoso forzando un reconocimiento político internacional cuya ausencia amenazaba la propia supervivencia del Régimen” (Correyero 2004)
El turismo en Palma empezó a recuperarse progresivamente a finales de los años 40, con un programa nacional de mucho éxito, dirigido a los recién casados españoles para pasar la luna de miel en Mallorca. El 1948 parece que vinieron unas 6000 parejas de todo España. Esta promoción se vería reforzada con la difusión y el éxito del cartel del nido de 1950. De hecho, el éxito del cartel Luna de miel en Mallorca fue aplastante, sobre todo si tenemos en cuenta las múltiples reediciones de los años posteriores y que seria ampliamente reproducido a postales, sellos o etiquetas de maleta, entre otros.
De estos años, y según los datos de la Cámara de Comercio, el 1945 llegaron a Mallorca 53.134 turistas, entre los cuales había solo 691 que eran extranjeros. El año siguiente fueron 61.514 los visitantes, entre los cuales se contaban 1.229 extranjeros. El 1950 ya vinieron casi el doble, 98.000 turistas, de los cuales 22.000 eran extranjeros, predominando los franceses. La máquina turística se volvía a poner en marcha. El 1960 llegarían a Palma 361.000 personas. Habíamos pasado de 5 mil a 23 mil plazas hoteleras, la mayoría al Paseo marítimo y S’Arenal.
A pesar de la parada de 14 años, se había conseguido mantener una infraestructura hotelera, unos servicios turísticos y una mano de obra especializada que jugaron un papel muy importante por el retorno del turismo. Este era un turismo diferente del de antes de la guerra pero seguía los pasos del anterior.
Despacio Europa se recuperaba de la Segunda Guerra Mundial y se empezaban a pagar las vacaciones a los trabajadores que -si podían- escogían España como destino y Mallorca era una de los preferidos. También fue muy importante el traspaso de la aviación de Guerra a la Civil, tanto de pilotos como de aviones, cosa imprescindible por el crecimiento del flujo de turistas. Todo acompañado por una política más favorable para la obtención de visados y unos precios más baratos que los europeos, el flujo de turismo fue aumentando año tras año.
El turismo cobraba de cada vez más fuerza y para darle un empujón, el Fomento del Turismo de Mallorca impulsó las Asambleas de Turismo de Mallorca el 1951 y 1953, respectivamente. La primera asamblea, que se realizó en los salones del Ayuntamiento de Palma, suponía un paso importante en la gestión del Turismo, puesto que por primera vez el sector turístico tomaba conciencia de su importancia, se reunía, hablaba y tomaba decisiones colectivas. Las Asambleas estaban presididas por todas las autoridades de la isla y fueron un éxito de participación con más de 300 personas.
En aquel entorno surgió la increíble propuesta, hecho por la Diputación Provincial de Baleares, el 1955, de crear un impuesto al turismo para «plantear inversiones en el ámbito de la beneficencia y la cultura, además de dotar las Islas de inmejorables rutas, sanear, mejorar y embellecer los núcleos urbanos, rescatar inmuebles de gran importancia histórica o arquitectónica, lograr que la Provincia sea inmejorable centro de turismo nacional e internacional». Veure: “Un proyecto de impuesto turístico: la Carta Econòmica Provincial para Baleares” (Vives A.).
Su justificación oficial nos deja pasmados cuando dice: “ …fueron esfuerzos y fueron sudores que hicieron el milagro de que estas Islas se bastaran, hasta que en riada seguida y contínuo aumento llegaron a ellas miles y miles de nacionales y extranjeros, naciendo en esta Provincia el Turismo, que perjudicaba la economía familiar de muchos, enriquecía unos pocos y, al propio tiempo, creaba ingentes problemas a la Diputación y a los Concejos rectores de los Municipios de Mallorca e Islas hermanas, que es preciso solucionar.».
Después de muchos debates todos los sectores económicos se pusieron en contra y la propuesta se dejó en el cajón. Se repetiría la historia el 2002 con la famosa Ecotasa del Gobierno de Antich y “reimplantando” como Impuesto de Turismo Sostenible el 2016 con el Gobierno de Armengol. Esta tercera vez parece que se consolidará.
Está claro que el Fomento de Turismo de Mallorca volvía a ser el gran promotor de la industria turística, como bien nos explica Antoni Vives en su detallada historia de la asociación. En aquellos años 50 estaba presidido por Gabriel Roca, ingeniero y director de Obras del Puerto y protagonista de la realización del Paseo Marítimo, sueño tan estimado entre los “insensatos” Bennasar y Parietti. Este último todavía lo pudo ver realizado, puesto que formaba parte de la Junta de Gabriel Roca, junta que estaba integrada por personas con experiencia diversa, insertadas dentro de las estructuras franquistas nacionales o locales del momento.
En la primera asamblea turística se trataron muchos de temas entre los cuales queremos resaltar la petición de crear una autopista que enlazara Palma con el Aeropuerto de Son Bonet y una línea aérea que hiciera París-Palma. También es curioso que ya se hiciera un debate sobre el todo incluido y sobre la necesidad de una Escuela de Hostelería.
Durante todos estos años 50 se hicieron una cantidad importante de actas de promoción y de defensa de los valores paisajísticos y costumbristas de nuestra tierra. Un ejemplo de este tipo de promociones es la versión del Bolero Balear por la cantante francesa Line Renaud . En buena parte toda la promoción de Mallorca estaba reforzada desde 1957 por una campaña nacional muy exitosa que tenía como eslogan “Spain is different”, con el objetivo de mostrar en el mundo que España era diferente… pero europea.
No nos podemos olvidar aquí de unas guías importantes y de prestigio en aquella época que eran las que publicaba la editorial Destino de Barcelona. Y es que el 1950 publicó la famosa Guía de Mallorca, Menorca e Ibiza realizada por el conocido escritor Josep Pla, de la cual reproducimos este trocito que habla del ambiente de las calles de Ciutat:
“Todo esta un poco mezclado. Ello produce el mayor encanto de Palma: lo imprevisto, la sorpresa. Las primeras son las calles de los pequeños comercios, de las tiendas, de las olorosas confiterias. Tienen un trazado curvilineo. Estan admirablemente empedradas. La caligrafía comercial, abundantísima, no molesta. Todo en ellas es pequeño, personal, vivo. Su anchura, discreta, mantiene en ellas una luz suave, amortiguada, deliciosa. La considerable afluencia de paseantes, el constante andar y venir, no logra romper la intimidad que reina en ellas.”
Otros materiales importantes para la promoción turística de aquellos años cincuenta fueron el folleto Mallorca información general, las guías hoteleras de Mallorca o el film documental Viaje a Mallorca. Todos estos materiales aportaban una gran cantidad de información de la isla de Mallorca pero sobretodo de las posibilidades que ofrecía la ciudad de Palma.
Revisat per
Antoni Vives ReusAntoni Vives Reus, es licenciado en Historia por la Universidad de las Islas Baleares. Doctor en Historia Contemporánea por la UIB (2005) y doctor en Estudios Culturales Mediterráneos por la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona (2010). Profesor del Centro de Enseñanza Superior Alberta Giménez CESAG-UP Comillas. Miembro del Grupo de Estudio de la Cultura, la Sociedad y la Política en el Mundo Contemporáneo de la UIB. Entre otras publicaciones es autor de los libros de Turismo y sociedad en las Islas Baleares (2002); Historia del Fomento del Turismo de Mallorca (1905-2005) (2005); Los museos de las Islas Baleares (2009).
Fonts consultades:
- Serra A. i Vives A. Les assemblees turístiques de Mallorca. 1951-1953. CEDOC
- Correyero Ruiz Beatriz. La administració turística espanyola entre 1936 y 1951. (2004), pp. 55-79 Instituto de Estudios Turísticos. Secretaría General de Turismo, Secretaría de Estado de Turismo y Comercio
- Sasha D. Pack. La invasión pacífica. Los turistas y la España de Franco.
- Pasado y presente del Gran Hotel. Fundación “La Caixa”. Illes Balears. 1993
- Vives Reus Antoni. Història del Foment de Turisme de Mallorca. (1905-2005). Editat pel Foment del Trisme de Mallorca. 2005.
Referencies web i documentals.
Foment del Turisme. Un viaje a Mallorca. 1958
https://www.youtube.com/watch?v=EMzq1UBQjjw
Sobre Robert Graves.
Antoni Capella..http://www.rtve.es/alacarta/videos/baleares-un-viaje-en-el-tiempo/baleares-viaje-tiempo-robert-graves-1-1929-1936/1963528/
Inicis del turisme.
https://www.youtube.com/watch?v=ri-NOx1dq0o
Balears are booming
http://fites-geografiques.blogspot.com/2015/08/the-balearics-are-booming.html
Line Renaud. Bolero Balear.
«My Majorca» (1955) de George Hoyningen-Huene, produit per la nord-americana Pacific Pictures amb la participació al guió de Robert Graves.